• En la desgracia conviene tomar algún camino atrevido. Lucio Anneo Séneca.
• En la tormenta es cuando se conoce al buen piloto. Lucio Anneo Séneca.
• En la tribulación acude luego a Dios confiadamente y serás esforzado y alumbrado y enseñado. San Juan de la Cruz.
• En las fatigas y en los sufrimientos no se olvide que tenemos un gran premio preparado en el cielo. San Juan Bosco.
• En mil aflicciones, no son quinientas de ellas que cooperan para el bien del creyente, sino novecientas noventa y nueve más una – las mil. George Müller.
• En una vida sin penas, acaban por relajarse las cuerdas del alma. Johannes Kepler.
• La desdicha es grande, pero el hombre es aún más grande que la desdicha. Rabindranath Tagore.
• La pobreza y el sufrimiento no están para que los entendamos, sino para que los resolvamos. San Vicente Ferrer.
• La vida es un arco iris que incluye el negro. Yevgeny Yevtushenko.
• La vida es un calvario. Conviene subirlo alegremente. San Pío de Pieltrecina.
• Lamentar un infortunio pasado, y que no existe, es la más segura vía de crearse otro infortunio. William Shakespeare.
• Las lágrimas son la sangre del alma. San Agustín de Hipona.
• Las pruebas a las que Dios os somete y os someterá, todas son signos del amor Divino y Perlas para el alma. San Pío de Pieltrecina.
• Las tribulaciones del mundo están llenas de pena, y vacías de premio; pero las que se padecen por Dios se suavizan con la esperanza de un premio eterno. San Efrén.
• Llorar, sí; pero llorar de pie, trabajando; vale más sembrar una cosecha que llorar por lo que se perdió. Alejandro Casona.
• Lo importante no es lo que sufres sino cómo lo sufres. Lucio Anneo Séneca.
• Los hombres solo sufren por un motivo; porque no pueden amar como Cristo crucificado. Kiko Argüeyo.
• Es mejor sufrir por la causa de Cristo y no que la causa de Cristo sufra. Alba Lucía.
• Lo que nos hace sufrir nunca es una tontería, puesto que nos hace sufrir. Amado Nervo.
• Los ángeles sólo nos tienen envidia por una cosa: ellos no pueden sufrir por Dios. Sólo el sufrimiento nos permite poder decir con toda seguridad: Dios mío, ¡mirad cómo os amo! San Pío de Pieltrecina.
• Los hermanos que sufren son las joyas de Dios. San Vicente de Paúl.
• Nadie es tan desdichado como la persona que nunca ha sufrido. Joseph de Maistre.
• Nadie llegó jamás a la inmortalidad sino por el camino de la aflicción; y he aquí un gran motivo de consuelo para todas nuestras penas. San Francisco de Sales.
• No hay árbol que el viento no haya sacudido. Proverbio hindú.
• No hay hombre en el mundo sin tribulación, aunque sea rey o papa. Y ¿quién es el que esta mejor? Ciertamente, el que padece algo por Dios. Tomas Kempis.
• El padecer templa el alma, y la fortalece para seguir la marcha. Alicia Beatriz Angélica Araujo.
• Por muy altas que sean las olas, el Señor es más alto. ¡ Espera!... la calma volverá. San Pío de Pieltrecina.
• Por todas partes por donde sufren corazones humanos, Cristo pone su morada. Francois Mauria.
• Puedes emplear hombres y contratar manos que trabajen para ti, pero debes ganar sus corazones para que compartan tus sufrimientos. Tiorio.
• Quien comienza a amar debe estar dispuesto a sufrir. San Pío de Pieltrecina.
• Quién no ha tenido tribulaciones que soportar, es que no ha comenzado a ser cristiano de verdad. San Agustín.
• Quien se aflige antes de tiempo se aflige más de lo necesario. Lucio Anneo Séneca.
• Quien supo padecer, sabrá vencer. Refrán español.
• Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas. Rabindranath Tagore.
• Si nada padeciste, no sabes compadecerte. Niccolo Tommaseo.
• Si yo no hubiera estado convencido que cada prueba adicional fue ordenado por misericordia y amor infinito, no hubiera sobrevivido los sufrimientos acumulados. Adoniram Judson